miércoles, abril 21

Sucede que a veces la vida mata, y te encuentras solo en este corazón no reciclable. Se hunden petroleros desahuciados y sospechas que provocan miopía en lanzadores de puñales.

Pero sucede también, que sin saber cómo ni cuándo algo te eriza la piel y te rescata del naufragio.

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